El umbral de relajación se debe presentar en situaciones de: Relajación, cuando no participa de forma activa en un movimiento.
El umbral intermedio debe estar un músculo en este umbral en situaciones de movimiento cotidianas como puede ser caminando por una superficie habitual o cuando participe de forma activa en un movimiento con poca exigencia.
Hemos llegado al umbral que buscamos para conseguir adaptaciones de fuerza, durante ejercicios con una resistencia o fuerza exigente.
Esto se debe presentar en movimientos explosivos como saltos, sprints o golpeos rápidos, también suele aparecer en ejercicios con cargas máximas.
Antes dudabas si el ejercicio que planteabas cumplía tus objetivos, ahora conoces al detalle cuánto debe activar la musculatura de tu paciente para obtener adaptaciones de fuerza.
Ahora controlas su actividad y te aseguras de que el ejercicio cumple con su objetivo.