Mantén la calma, es fácil dejarse llevar por el pánico, pero mantener la compostura te permitirá tomar decisiones racionales.
Tómate un momento para pensar en lo que está sucediendo y cómo puedes reaccionar de manera efectiva.
Presta atención a los sonidos y movimientos que puedas percibir.
Si es seguro hacerlo, intenta ubicarlos y determinar si hay una amenaza inmediata.
Conocer la situación te permitirá actuar con más información, pero recuerda que nunca debes arriesgar tu seguridad al intentar investigar.
Si tienes la oportunidad, llama a las autoridades de emergencia, proporciona información clara y concisa: tu ubicación, una descripción del incidente y cualquier detalle relevante.
Mantén la línea abierta si es seguro y necesario, ya que tu seguridad es lo más esencial en ese momento.
Si tu alarma ha sonado, es una señal de alerta, activa cualquier sistema de seguridad que tengas en casa.
Si hay un modo de enviar una alerta silenciosa a las autoridades, utilízalo.
Además, avisa a los vecinos si tienes medios para hacerlo, como un timbre o luces que llamen su atención.
Busca un lugar seguro como una habitación con cerradura, si es posible, lleva contigo tu teléfono móvil para que puedas comunicarte.
Asegúrate de cerrar la puerta con llave, apaga las luces y silencia el teléfono para no ser detectado.
En tu refugio, espera la llegada de las autoridades, mantén tu teléfono cerca y prepárate para brindar información adicional sobre lo que sucede.
No te enfrentes al intruso, lo mejor es esperar a los profesionales.
Comunica a tu familia qué hacer en caso de intrusión y realiza simulacros para que todos estén preparados.
Considera implementar un sistema de seguridad robusto, como cámaras y alarmas que aumenten la protección de tu hogar.
Una vez que la situación se haya resuelto, habla con tus vecinos sobre lo sucedido y asegúrate de informar a las autoridades sobre cualquier detalle que puedan haber pasado por alto.
Además, es un buen momento para evaluar la seguridad de tu hogar y hacer mejoras si es necesario, identificar vulnerabilidades puede ayudar a prevenir futuras intrusiones.