Para evitar que las puertas rechinen, sólo tienes que aplicar aceite sobre las bisagras y dejar unos seguros que el producto se extienda bien.
Usar aceite de oliva en su forma líquida o en aerosol es una solución perfecta para impedir que tus puertas emitan sonidos desagradables.
Antes de utilizarlo, limpia bien la bisagra para que esté limpia de polvo y luego frota el aceite por las zonas de intersección.
Las velas no es sólo el mejor remedio cuando hay un corte de luz, además, sirve para evitar que las puertas de tu casa chirríen.
Éstas deben ser transparentes o blanca, puedes aplicarla de forma directa sobre la bisagra o derretir un poco la vela dentro de un microondas para luego extender la cera líquida en esta zona.
Otra alternativa a las anteriores es utilizar vaselina, si no quieres escuchar ruidos molestos, frota las bisagras con este producto.
Luego, comprueba que el sonido ha desaparecido.
Este producto cuenta con aceites naturales que te ayudarán a lubricar la puerta, debes frotarlo en la intersección de la bisagra para eliminar el ruido.
La mantequilla suele reemplazar al aceite, ya sea para frituras u otras preparaciones en la cocina, puede ser una sustituta del aceite para hacer desaparecer el chirrido de las puertas.
Se puede aplicar directamente en las bisagras o derretirla un poco en el microondas y aplicarla líquida.
Hay más como pueden ser la utilización de un lápiz de carbon para pintar la bisagra, extender crema de afeitar sobre un paño y luego frotarlo sobre las bisagras, etc.