¿Cómo funcionan las puertas del ascensor?

En el corazón del sistema de motor de la puerta del ascensor de pasajeros se encuentra el motor mismo. Este componente vital es responsable de la apertura y cierre suave y preciso de las puertas del ascensor. El motor suele estar equipado con un mecanismo de engranajes que garantiza movimientos precisos, permitiendo que las puertas se alineen perfectamente con la cabina del ascensor y los pisos. Cuando un pasajero llama a un ascensor en un piso en particular, se envía una señal al sistema de control, que luego activa el motor. El motor cobra vida y utiliza su potencia para hacer que se abran las puertas del ascensor. El sistema de motor de la puerta del ascensor de pasajeros actúa como fuerza motriz detrás del movimiento sincronizado de las puertas del ascensor. A través de una serie de acciones perfectamente sincronizadas, el motor asegura que las puertas se abran y cierren suavemente y con precisión. Una de las ventajas notables del sistema de motor de puerta de ascensor de pasajeros es su capacidad para manejar cargas pesadas con facilidad. Esta fuerza mejorada permite que el motor abra y cierre las puertas sin esfuerzo, incluso cuando se enfrenta a condiciones exigentes o a un gran número de pasajeros durante las horas pico. El sistema de motor de la puerta del ascensor de pasajeros desempeña un papel fundamental en el perfecto funcionamiento de los ascensores. Desde el potente motor hasta el mecanismo de engranajes de precisión, este sistema garantiza la apertura y cierre suaves de las puertas del ascensor.

A través de un motor eléctrico, se abren y cierran de forma automática. Todas estas puertas están divididas en varias diferentes hojas ubicadas en los laterales del hueco del ascensor. Este número de hojas depende del espacio del que dispone el hueco. Las puertas semiautomáticas o batientes conservan cerraduras y elementos de seguridad que monitorizan el cierre. A pesar de que este cierre es automático gracias a su sistema de muelles y amortiguadores que evitan que golpee el marco, la apertura ha de realizarse de forma manual. Las automáticas cuentan con sistemas de seguridad y fotocélulas o barras infrarrojas, ya que estas detectan cuándo han de cerrarse. En caso de emergencia por incendio, son resistentes al fuego y evitan su propagación por el edificio. Se colocan por lo general en áreas de espera y poseen un par de contactos eléctricos que la controlan. Se adaptan al espacio de la cabina y se desplazan junto a esta. Se tratan de puertas totalmente interiores.