El tipo de puerta y su material influirán en el tipo de cerradura que necesitas. Por ejemplo, las puertas de madera suelen ser compatibles con cerraduras de embutir, mientras que las puertas de metal pueden requerir cerraduras específicas para metal.
Revisa las dimensiones de tu puerta y la ubicación del agujero para la cerradura.
Asegúrate de que la cerradura que elijas se ajuste correctamente.
Si tienes dudas, consulta con un cerrajero profesional que pueda hacer una evaluación y recomendar la cerradura más adecuada para tu puerta.
Considera el número de llaves que necesitas.
Muchas cerraduras modernas permiten la duplicación controlada de llaves, lo cual es útil si necesitas hacer copias adicionales para otros miembros de la familia o para situaciones de emergencia.
La calidad del material de la cerradura es un aspecto fundamental.
Las cerraduras de aluminio y acero inoxidable ofrecen una mayor resistencia y durabilidad en comparación con otros materiales.
Un buen material asegura una mayor vida útil y una mejor protección contra el desgaste y el intento de intrusión.
Conoce los tipos de cerraduras, como las cerraduras de cilindro, también conocidas como bombines, las cerraduras de embutir, las cerraduras de sobreponer y los cerrojos, que pueden variar según sea el tipo de puerta.