¿Qué es una puerta reforzada?

Aquí se cambia todo, marco, puerta y cerradura. El marco y la puerta son de madera, siendo el marco reforzado con chapa de hierro, y la puerta con doble chapa de hierro, tanto en la cara exterior de la puerta como en la interior. Se instala una cerradura de seguridad, generalmente multipunto, y embutida en el canto de la puerta (no se ve desde el interior de la puerta). En obra nueva, los marcos no están reforzados con hierro, sino que son de cartón prensado (dm o mdf) rechapados de madera. Marco, puerta y cerraduras son nuevas, no aprovechándose nada de lo anterior. Marco y puerta de hierro, que se revisten de madera. Cerradura ó cerraduras de seguridad, que generalmente son multipunto y se alojan dentro de la puerta (no se ven desde e interior de la puerta).

La puerta acorazada es más segura que la blindada frente a ataques externos, eso es evidente. Sin embargo, la única diferenciación que debemos hacer en materia de seguridad no es el tipo de puerta, sino qué clase o grado de resistencia tiene. En 2013, la normativa española UNE-85160 dejó de diferenciar entre los términos de puertas acorazadas o puertas blindadas y pasó a denominarlas como puertas de seguridad. Estas puertas se basan en el grado de seguridad y resistencia frente a ataques y están certificadas mediante ensayos y normativa. La clase 3 es la que marca la denominación de puerta de seguridad. Es decir, para que una puerta sea considerada como puerta de seguridad debe tener al menos una clase 3 de resistencia ante los ataques. Las puertas de grado 4 y 5 también están catalogadas como puertas de seguridad y ofrecen una protección y resistencia mayor que las de clase 3. Estas puertas especiales están preparadas para evitar ataques realizados por verdaderos profesionales del robo y el asalto.

Una puerta de seguridad es un tipo de puerta de entrada diseñada y fabricada específicamente para proporcionar un nivel adicional de protección contra intrusiones y ataques en comparación con las puertas estándar. Estas puertas de entrada están diseñadas para resistir ante intentos de robo, vandalismo u otros tipos de intrusiones no deseadas en viviendas, empresas u otras propiedades. Las puertas de seguridad suelen estar construidas con materiales robustos y resistentes, como acero, aluminio o madera reforzada con metal. Estos materiales están diseñados para ser difíciles de forzar o romper, lo que brinda una barrera física sólida contra los intrusos. Además de su resistencia estructural, las puertas de seguridad a menudo están equipadas con cerraduras y sistemas de bloqueo de alta seguridad para reforzar aún más su protección. Las puertas acorazadas son una opción popular para aquellos que buscan reforzar la seguridad de sus viviendas, fabricadas con estructura de acero de alta resistencia, hoja de acero de al menos 2 mm de grosor, marco de acero reforzado y cerraduras de alta seguridad con varios puntos de anclaje. Las puertas blindadas son otra opción confiable en cuanto a seguridad para el hogar, fabricadas con una estructura de madera reforzada con chapa de acero, hoja de acero de 1 mm de grosor, marco de madera reforzado y cerraduras de seguridad con varios puntos de anclaje.