En un mundo donde la sostenibilidad se ha convertido en un imperativo, el diseño emerge como un aliado fundamental en la búsqueda de soluciones para la movilidad urbana sostenible. La tecnología también desempeña un papel crucial, el Ayuntamiento de Madrid utiliza una plataforma de Big Data para comprender mejor los patrones de movilidad de la población. Esto permite realizar una planificación más inteligente y una gestión más eficiente de los espacios públicos. Además, permite el diseño y desarrollo de proyectos que permiten dar respuesta a las necesidades de las ciudades, como la gestión eficiente de la carga y descarga de mercancías. La mesa redonda promovida por el Design Institute of Spain (D!OS) junto a Empresas por la Movilidad Sostenible, contó con referentes empresariales e institucionales como el Ayuntamiento de Madrid, Merlín Properties, MORPH y BMW Group España. En este contexto, Lola Ortíz, directora general de planificación e infraestructuras de movilidad del Ayuntamiento de Madrid, destacó la necesidad de integrar el urbanismo, el medioambiente y la movilidad para lograr una visión estratégica.
Un claro ejemplo de este enfoque son los diferentes proyectos en lo que se está apostando por la transformación de calles tradicionales en corredores verdes que incluyen carriles bici y bus, adaptándose a las necesidades cambiantes de la ciudadanía. César Frías, arquitecto y Socio Director en MORPH, destacó la importancia de adaptar el diseño urbano a la evolución de la movilidad y la inclusión de servicios en los edificios que favorezcan un estilo de vida más sostenible, como la generación de energía, las plazas para bicicletas o puntos de recarga. David Moreno de Merlin Properties habló de cómo, partiendo del análisis de los hábitos de movilidad de los usuarios de cada uno de sus edificios, han logrado ofrecer un valor añadido a las empresas a través del diseño de Planes de Movilidad Sostenible.
En última instancia, César Frías y May López subrayaron la importancia de cuestionar los paradigmas establecidos y repensar el urbanismo actual, así como la necesidad de trabajar unidos para alcanzar una movilidad sostenible integral. En resumen, el diseño y la movilidad sostenible deben converger para transformar nuestras ciudades en entornos más habitables, eficientes y respetuosos con el medioambiente.