Los materiales sostenibles en la construcción son aquellos que se obtienen, procesan y utilizan de manera responsable, minimizando su impacto ambiental a lo largo de su ciclo de vida. Estos materiales se caracterizan por ser: Renovables: Provienen de fuentes naturales que pueden regenerarse, como la madera de bosques certificados o el corcho. Reciclados: Se fabrican a partir de materiales de desecho, como el acero, el aluminio o el plástico. De bajo impacto: Su producción y uso generan un impacto ambiental mínimo, como la tierra apisonada o la piedra natural local. Eficientes: Optimizan el uso de recursos y energía, como el aislamiento térmico de alta calidad o los sistemas de iluminación LED. La gama de materiales sostenibles disponibles para la construcción es cada vez más amplia. Algunos ejemplos destacados incluyen: Madera certificada: Proviene de bosques gestionados de manera sostenible, asegurando la reforestación y la protección de la biodiversidad. Bambú: Un material renovable, resistente y versátil que se utiliza para estructuras, revestimientos y muebles. Corcho: Un material natural, aislante térmico y acústico, procedente de la corteza del alcornoque. Hempcrete: Un material compuesto elaborado con cáñamo y cal, con excelentes propiedades aislantes y baja huella de carbono. Hormigón prefabricado: Permite optimizar el uso de materiales y reducir el desperdicio en obra. Materiales reciclados: Acero, aluminio, plástico, vidrio y otros materiales pueden ser reciclados y utilizados en la construcción con propiedades similares a los materiales originales. Tierra apisonada: Un material tradicional y sostenible utilizado para muros y estructuras, con bajo impacto ambiental. Piedra natural local: Reduce el transporte de materiales y se integra en el entorno natural.