Un juego inclusivo es aquel diseñado para ser accesible y disfrutable para niños de todas las edades, sin importar sus habilidades, incluyendo aquellos con discapacidades físicas, sensoriales o cognitivas. Estos juegos buscan eliminar las barreras que impiden que algunos niños participen y ofrecen una experiencia de juego que es acogedora y segura para todos. Características de los Juegos Inclusivos: Accesibilidad: Superficies planas y firmes, rampas en lugar de escaleras, y elementos de juego a diferentes alturas. Diversidad de Juegos: Ofrecen una variedad de experiencias sensoriales y físicas, desde columpios adaptados hasta paneles táctiles y sonoros. Seguridad: Materiales no tóxicos, bordes redondeados y áreas claramente definidas para diferentes edades y habilidades. Estimulación Sensorial: Incluyen elementos que estimulan los sentidos, como colores brillantes, texturas variadas y sonidos interesantes. Beneficios de los Juegos Inclusivos: Fomentan la Empatía y la Socialización: Al jugar juntos, los niños aprenden a entender y respetar las diferencias. Desarrollo Integral: Estimulan el desarrollo físico, cognitivo, emocional y social. Inclusión Social: Permiten que niños con y sin discapacidades compartan experiencias comunes. Los juegos inclusivos en parques y plazas son más que simples áreas de juego; son espacios que promueven la igualdad, el respeto y la diversión para todos.