Jane Percy nació en Escocia, su padre era corredor de Bolsa y conoció a su marido, el duque de Northumberland, cuando tenía 16 años.
No proviene de una familia aristocrática, pero emparentó con una de las sagas familiares más ricas y con más tierra de Inglaterra desde hace 700 años.
Tuvieron cuatro hijos y hoy viven todos fuera de casa, excepto uno de ellos, que está al frente del negocio con su padre: el mantenimiento del castillo y un jardín de cuento que inauguró oficialmente en 2000 el entonces príncipe Carlos.
El parque infantil es el sueño de esta enérgica duquesa que está empeñada en que los niños abandonen sus teléfonos móviles.
«Este parque ha nacido porque necesitamos ayuda con la adicción a la tecnología.
Este parque atrae los sentidos y los anima a mirar y escuchar», afirma sobre su proyecto.
«Podría estar viviendo en Marbella...»
Un miembro del Parlamento, por entonces ministro encargado de fomentar el crecimiento fuera de Londres, apoyó su proyecto para acabar con el aislamiento en esta región del noreste de Inglaterra.
Tiene los derechos de los diseños del parque.
«Veo las oportunidades de construirlo por todo el mundo.
Una marca fuerte inglesa que ha nacido en Northumberland», afirma emocionada.