Sentirse protegidos y comprendidos durante su infancia les ayuda a adquirir una actitud positiva y resiliente frente a los desafíos de la vida.
Un ambiente seguro es esencial.
Para ello,
un ambiente seguro es esencial.
La seguridad, por tanto, también implica la protección contra cualquier forma de violencia o abuso.
La propia Convención de los derechos del Niño habla de protección infantil haciendo referencia a la prevención y la respuesta a la explotación, el abuso, la negligencia, las prácticas nocivas y la violencia contra los niños, niñas y adolescentes.
La verdadera felicidad se construye día a día, brindándoles espacios en los que puedan expresarse, explorar y aprender sin miedo.
La felicidad infantil se fortalece a través del amor, la seguridad y la crianza positiva, elementos que permiten a los niños explorar y desarrollar su potencial en un ambiente saludable.
El bienestar infantil depende en gran medida de contar con un entorno seguro que brinde tanto protección física como estabilidad emocional.
Aldeas Infantiles SOS cuenta una Política de Protección Infantil que busca promover el buen trato infantil implicando a niños, trabajadores, colaboradores, familias y entorno.