Los centros de datos generan la mayor parte de la huella de carbono digital. Y es que estos centros de datos son de suma importancia pues toda la información que manejamos online, todos los negocios, todo el entretenimiento, gran parte de la economía, e incluso de nuestras identidades está ahí dentro. Por supuesto están equipados con copias de seguridad y cientos de medidas de protección, las cuales irremediablemente dejan su huella.
Suministro eléctrico
Asimismo, estos centros de datos gastan electricidad y energía en grandes cantidades. Pero además, nosotros cada vez que usamos Internet o la televisión, hacemos un gasto de energía relacionado con las TIC y por tanto, pertenece a la huella de carbono digital. El suministro eléctrico para todas estas acciones: enviar mensajes de correo electrónico, ver Netflix, subir contenido a Instagram, buscar una receta… A nivel mundial producen tanto gasto energético como un solo país y se espera que pronto iguale al gasto energético del sector de los transportes.
Todo esto está relacionado con las horas de uso. Si lo piensas, quizá apenas existen horas del día en la que no estés utilizando un aparato electrónico. El ordenador para trabajar, la televisión y el móvil para descansar, el móvil para comunicarte, para entretenerte… y vuelta a empezar. Hay dispositivos como los móviles que están encendidos las 24 horas y otros como la televisión al menos lo están 8 horas de media.
Todos estos cambios de comportamiento debido a las oportunidades que ofrecen los dispositivos han aumentado la demanda de electricidad en el mundo.