Para comprobar si una puerta cortafuegos es conforme, es importante seguir una serie de pasos. Debe ser una puerta cortafuego certificada, verifique que haya una etiqueta o un enchufe en la parte superior o lateral de la puerta. Si la puerta cortafuegos está equipada con un dispositivo de cierre automático, abra la puerta completamente, suéltela y permita que se cierre, ¿se cierra en el marco sin pegarse al piso o al marco, ni atascarse en el pestillo o el sello y sin golpearse demasiado fuerte. Asegúrese de que la hoja de la puerta se asiente contra el tope de la puerta y no esté deformada. El espacio entre la hoja de la puerta y el marco de la puerta debe estar entre 2 mm y 4 mm. Los marcos de las puertas deben estar firmemente sujetos a la pared y libres de daños. Las puertas cortafuegos deben estar equipadas con juntas intumescentes, asegúrese de que estén en su lugar, bien sujetos dentro de la ranura del marco o de la hoja de la puerta, continuos alrededor del marco y libres de daños. Cada puerta cortafuego necesita un mínimo de tres bisagras, firmemente fijadas con todos los tornillos instalados. Asegúrese de que esté correctamente colocado y libre de daños y de que esté ajustado correctamente para cerrar la puerta en el marco pero sin golpear demasiado fuerte. Compruebe que todas las piezas de la puerta cortafuegos no tengan daños, asegúrese de que ningún vidrio de la puerta esté roto. La seguridad contra incendios tiene que ver con el sentido común, si tiene una puerta cortafuegos que parece dañada o defectuosa, haga que la revisen. De todos modos, es recomendable pedirle a una persona competente que revise sus puertas cada seis meses para asegurarse de que estén en buen estado de funcionamiento. El mantenimiento regular mantendrá a todos seguros.