La señalización de seguridad y salud en el trabajo no puede sustituir la adopción de medidas técnicas de protección colectiva, ni tampoco a la información y formación de los trabajadores sobre los riesgos. La finalidad de la señalización es llamar la atención sobre situaciones de riesgo de una forma rápida y fácilmente comprensible, pero no sustituye a las medidas preventivas. Su existencia nunca puede sustituir a las medidas técnicas y organizativas de protección colectiva y deberá utilizarse cuando mediante estas últimas no haya sido posible eliminar los riesgos o reducirlos suficientemente. La señalización ha de ser eficaz, para lo que es necesario evitar la sobreabundancia de señales, por el efecto negativo de desincentivar la atención, y asegurar que el emplazamiento y visibilidad o potencia en su caso son óptimas, además de realizar un mantenimiento adecuado para garantizar su funcionamiento o perfecto estado. Una adecuada señalización siempre debe estar acompañada de una información y formación sobre su significado. La señalización de seguridad y salud no sustituye a las medidas de protección colectiva y organizativas, por lo que se debe utilizar cuando no sea posible eliminar o reducir los riesgos mediante estas medidas.