Los talleres se dividen en tres tipos: los oficiales, que son los que se encargan exclusivamente de una marca o grupo automotriz; los multimarca, también llamados independientes; y los de red, que son franquicias conocidas pero no asociadas a ningún fabricante en concreto.
Los talleres oficiales son los que recomiendan las marcas, puesto que se trata de su propia red y, dado que están especializados en los coches de la firma, tienen más experiencia con éstos y a priori más capacidad de solventar problemas específicos.
Los talleres multimarca son talleres independientes que trabajan con coches de cualquier fabricante.
Los talleres de red son aquellos que pertenecen franquicias como, por ejemplo, Bosch.
Uno de los más habituales el taller de chapa y pintura, especializado en todo lo que con lleve reparar la carrocería del coche, golpes, arañazos y pintado de la misma.
Los talleres de neumáticos están especializados en el cambio de ruedas.
Los talleres de mecánica rápida se especializan en operaciones sencilla, sobre todo mantenimientos, cambios de filtro y otras tareas del cuidado del vehículo que han de realizarse de manera periódica.
Los talleres eléctricos se encargan de todo lo relacionado con la electricidad del vehículo, algo que va desde el alumbrado al cableado del vehículo.
Los talleres de mecánica general se encargan de todo.
Talleres autoservicio, lo que ofrecen son boxes a los que acudir con el coche, así como la maquinaria necesaria para llevar a cabo reparaciones de todo tipo.