Subir escaleras requiere un incremento de la fuerza y la movilidad articular.
El miembro inferior de apoyo debe soportar el peso corporal para mantener la estabilidad en carga.
El miembro inferior que oscila se flexiona rápidamente para pasar de un escalón inferior al siguiente superior.
Esta actividad requiere estabilidad, equilibrio, fuerza, coordinación, e influye positivamente en nuestra salud cardiovascular.
un ejercicio terapéutico excelente en determinadas fases de la recuperación de una lesión de rodilla.
Nos cuesta, nos cuesta mucho subir escaleras.
Nos falta el aire, nos queman las piernas, uffff….
Las rodillas duelen, empezamos a subir escaleras sólo de vez en cuando, en determinados entornos, cuando no nos queda más remedio.