Seguridad ante todo es lo principal al momento de diseñar o implementar la iluminación de una habitación para niños. Contar con iluminación muy resistente y preferentemente irrompible es crucial ya que así se evita cualquier tipo de accidente. Los cables de las lámparas de pie o de mesa no deben estar al aire libre ya que estos podrían ser enganchados y causar que la lámpara se vuelque. Se recomienda la colocación de protectores en los enchufes, así como también evitar que haya objetos con aristas o puntas filosas a la vista. La iluminación LED es la opción más segura ya que no genera calor, lo que reduce el riesgo de quemaduras en caso de que el pequeño decida tocar las luces. Además de eso, esta clase de iluminación no contiene sustancias tóxicas por lo que es aún más recomendable. La iluminación de una habitación debe estar distribuida según la función de cada sector. A grandes rasgos, existen tres clases de iluminación: general, de trabajo y de acento. La general sería toda la iluminación dirigida a alumbrar la habitación en su totalidad, la de trabajo se enfoca en áreas específicas de estudios y la de acento se usa para realzar algún punto de interés. En el mercado se pueden conseguir multitud de lámparas con diseños variados y características divertidas, pero en este caso sería recomendable apostar por diseños más neutros. Una buena opción serían plafones o downlights con tonos cálidos para lograr una experiencia agradable y uniforme. Es importante no dejar cables sueltos y colocar protectores en todos los enchufes para evitar accidentes. La iluminación LED es la más segura, ya que no genera calor y no contiene sustancias tóxicas. Además, se recomienda utilizar bombillas de policarbonato, que son resistentes a los impactos y no containingen materiales tóxicos, y que cuenten con el marcado CE y RoHS, que garantizan la calidad y seguridad de los productos. La iluminación general de un dormitorio infantil debe ser lo suficientemente intensa para que los niños puedan jugar y desarrollar sus actividades de forma cómoda. En cuanto a la iluminación de trabajo, se recomienda utilizar lámparas de mesa o flexos con luces frías que mejoren la concentración y faciliten las tareas. La iluminación de acento es opcional, pero puede ser utilizada para destacar elementos decorativos o arquitectónicos. En resumen, la iluminación de una habitación infantil debe ser segura, práctica y divertida, y debe considerar las diferentes actividades que se van a realizar en la estancia. La seguridad es lo más importante, y se debe priorizar la iluminación LED y la protección de los cables y enchufes. También es importante considerar la iluminación general, de trabajo y de acento, y utilizar lámparas y bombillas que sean seguras y eficientes.