Una puerta de salida de emergencia es una apertura fabricada para hacer más sencilla la evacuación de las personas en caso de emergencias, estas representan una parte fundamental de la planificación de la seguridad de cualquier edificio, especialmente en lugares concurridos, como centros comerciales, hospitales, escuelas, oficinas, hoteles, entre otros establecimientos públicos. Las puertas de salida de emergencia se diferencian de otro tipo de puertas porque dan acceso a una vía directa hacia un sitio seguro fuera del edificio, salvaguardando así a las personas.
Las barras de pánico son mecanismos de apertura colocados para facilitar la salida por medio de un empuje y permitir que las personas puedan abrir sin obstáculos.
Las puertas de empuje se abren mediante el empuje físico hacia afuera o hacia adentro, sin necesidad de un mecanismo adicional, por lo que son colocadas en áreas donde se necesita un acceso fácil y rápido, como en centros comerciales o aeropuertos.
El sistema de alarma de este tipo de puertas alerta a los propietarios sobre cualquier intento de intrusión o actividad sospechosa, esto gracias a que están equipadas con un dispositivo de alarma.
Estas puertas son componentes críticos en la seguridad contra incendios de un inmueble, ya que son fabricadas con materiales resistentes y están equipadas con mecanismos de cierre automático para garantizar que se cierren en caso de incendio.
El mecanismo de cierre automático de esta clase de puertas puede ser activado por diferentes métodos, como resortes, bisagras ajustadas o sistemas eléctricos.
Este tipo de puertas de salida se deslizan horizontalmente y se instalan en lugares donde no hay suficiente espacio para puertas tradicionales.
El espacio y el número de ocupantes son conceptos a tener en cuenta para una puerta de salida de emergencia.
Dependiendo de las visitas que se realicen a diario en un edificio, se tiene que tomar en cuenta el tipo de puerta de emergencia para facilitar la evacuación sin riesgos.
La puerta tiene que cumplir con las normativas locales, regionales o nacionales de seguridad y construcción para que puedan ser instaladas, garantizando así la protección de los individuos.
Así como la apertura de las puertas debe ser sencilla, de igual forma tiene que cubrir con las necesidades del espacio.
El mantenimiento regular de las puertas de salida de emergencia es esencial para garantizar su funcionamiento adecuado en situaciones críticas, por lo que es necesario que pasen por pruebas como las siguientes: Apertura y cierre: Verificar que la puerta se abra y se cierre suavemente y sin problemas.
Asegurarse de que el mecanismo de cierre automático funcione correctamente y que cierre la puerta completamente después de abrirla.
La puerta tiene una función de bloqueo que debe desactivarse para permitir la evacuación sin obstrucciones.
Revisar visualmente la puerta y sus componentes en busca de daños, desgaste, obstrucciones o cualquier problema evidente.
Si la puerta está equipada con una alarma o señalización, esta tiene que funcionar correctamente.
Al llevar a cabo un mantenimiento regular de las puertas de salida de emergencia, se garantizará su futuro funcionamiento para proteger la vida y el bienestar de las personas de un edificio en una situación de emergencia.