Las puertas o los marcos que están hinchas deben ser arreglados, pero el kit de la cuestión está en que si las arreglas en este estado es posible que cuando se quite la hinchazón quede un “hueco” entre el marco y la puerta y ese es un problema más complejo de arreglar. No es de preocuparse, solo de tener paciencia y esperar a que todo vuelva a su estado. Es recomendable, una vez localizado marcarlos con algo, un lápiz, por ejemplo, para no olvidar donde era el punto exacto y observarlo. La marca debe abarcar toda el área que roza, ya sea en el marco o el canto de la puerta.
Es simple, esperar a que la puerta se deshinche y poder ver el problema que causa esto. Por lo general, suele deberse a la falta de acabado en el canto; ya sea que la pintura se ha desgastado o sencillamente porque no tiene.
Atentos a estas 3 palabras; Lija, cepillo y pintura. Ya sea un problema de índole menor y para ello uses lija, o se trate de uno de mayor envergadura y tengas que cepillar debes recordar que todo en su justa medida ya que profundizar de mas es perjudicial. Si no es necesario lijar ni rebajar, quizá solo necesites pintura.
Si ya lijaste o cepillaste, o encontraste que el problema solo es de pintura, pues ya puede aplicarla. Es recomendable que escojas pintura para madera del color de la puerta, si no hay el mismo tono puedes pintar la puerta completa con otro que prefieras.