Las zonas de trabajo son áreas dentro de una cocina, cada una de las cuales tiene una finalidad específica.
Las más comunes son: almacenamiento de alimentos, preparación de alimentos, cocinado, limpieza y reciclado, y servicio.
Las cocinas más grandes, especialmente las que van a ser utilizadas simultáneamente por más de una persona, se beneficiarían del concepto de zonas de trabajo.
Si un diseñador de cocinas decide planificar la cocina de un cliente teniendo en cuenta el principio de las zonas de trabajo, tendrá que asegurarse de que la distribución de la cocina esté dividida por funciones.
Cada zona funcional debe estar debidamente equipada para la serie de tareas a realizar.
Utilizando correctamente las zonas de trabajo de la cocina, un buen diseñador de cocinas con el software de diseño de cocinas adecuado puede crear una distribución de la cocina perfectamente personalizada y funcional.
Normalmente, las 5 zonas de la cocina son: Zona de almacenamiento de alimentos Zona de preparación de alimentos Zona de cocinado Zona de limpieza y reciclado Zona de servicio.
La zona de almacenamiento de alimentos se refiere a todos los comestibles almacenados: refrigerados, frescos y congelados, así como conservas y productos secos.
La preparación de alimentos requiere suficiente espacio en la encimera, así como cajones cercanos para guardar tablas de cortar, cuencos, cuchillos y otros utensilios y herramientas de preparación de alimentos.
La zona de cocción incluirá todos los aparatos de cocina, como la vitrocerámica, el horno, el extractor y otros utensilios relacionados con la cocina.
La zona de servicio es el lugar de la cocina donde se guarda toda la vajilla, cristalería, cubertería y utensilios para servir.
Organizar una cocina en zonas de trabajo puede transformar la forma de cocinar y hacer que el tiempo en la cocina sea más eficiente y agradable.
Siguiendo los consejos y sugerencias sobre las zonas de la cocina, podrás crear una cocina que se adapte a tu estilo y a tus necesidades culinarias.