Los pasillos son comunes en viviendas, en donde dan acceso desde el vestíbulo o el salón a las habitaciones interiores. Con propósitos similares también existen pasillos en otros edificios como oficinas, hoteles, centros educativos, centros de salud, etc. Los pasillos se encuentran en tiendas, almacenes y fábricas, en donde tienen estanterías a ambos lados. En almacenes y fábricas los pasillos pueden consistir en paletas del almacenaje y en fábricas los pasillos pueden separar áreas de trabajo. En los gimnasios, los equipos de ejercicio se disponen normalmente en pasillos. En las viviendas actuales los pasillos suelen tener una anchura de 80 cm a 100 cm y su longitud depende tanto del tamaño de la casa como de la distribución de sus habitaciones. El pasillo suele ser una zona interior por lo que es importante que tenga una buena iluminación. Debido a sus reducidas dimensiones no admite mucho mobiliario, aunque puede alojar mesas o sillas pequeñas, aparadores o estanterías, así como diversos ornamentos tales como cuadros, etc. El término pasillo se aplica también a los corredores estrechos de transportes y otros centros y establecimientos. Se llama pasillo al corredor que comunican las filas de asientos en diferentes medios de transporte: trenes, aviones, autobuses, etc. En este caso, es posible que a la hora de sacar el billete se pueda escoger entre ventana o pasillo. También se llama pasillo a los accesos que se encuentran en estadios deportivos o en salas de teatro, cine, conferencias, etc. Se distinguen los siguientes tipos: Pasillos de aspiración, pasillos principales y pasillos de acceso.