Tener el inodoro independiente del resto de elementos, bien 'a la francesa' o compartimentado, es una buena opción, pero no para los baños pequeños.
Un muro bajo mantiene un mínimo de privacidad para el área del baño, al mismo tiempo que permite que la luz circule, sin 'cortar' la habitación u obstruir la perspectiva.
Coloca una mampara de vidrio que eleve su altura hasta el techo.
A veces simplemente basta con aprovechar la planta del baño con una distribución que permita crear zonas con cierta privacidad.
Puedes aprovechar un rincón o una columna, independizándolos a través de los revestimientos o de algún accesorio.
No debes colocar el inodoro tras la puerta, es muy incómodo, y procura que no sea lo primero que veas al entrar, es muy poco estético, incluso cuando se trata de un diseño 10.
Un mueble bajo, preferiblemente una estantería o un módulo bajo con espacio para almacenar, es una buena solución estética y práctica para delimitar los inodoros en un baño.
Un tabique alto y estrecho aísla el inodoro sin sobrecargarlo, gracias a su poca profundidad.
Hasta arriba en modo pared o sin llegar al techo, para dejar pasar la luz, se adapta a la mayoría de los espacios e, incluso, puede servir como soporte para la ducha.
Una pared de cristal te permite aislar el inodoro del resto del baño sin perder espacio ni luz.
Al ser transparente, deja pasar la luz, mientras que si lo pones opaco o de colores, la filtra ligeramente, pero preserva la privacidad.