Primera fase: Inspiración
Aquí se trata de delimitar qué es lo que quieres diseñar ya que de esto va a depender tu éxito, sostiene la guía.
Primero necesitas escribir en una frase de qué se trata lo que quieres diseñar, que sea corta y fácil de recordar.
Al redactarla considera la variedad de soluciones y el contexto en el que está inserta la solución.
Que no sea ni muy amplio ni muy estrecho el enunciado, ten en cuenta qué es lo que realmente puedes hacer.
Ya que tengas este enunciato, necesitas crear un plan que considere toda la logística necesaria, calendario, línea de tiempo y a quién vas a entrevistar.
Este es un punto muy importante.
Necesitas escoger bien a quién entrevistar y qué le vas a preguntar.
Es clave que te quede claro cuáles son los dolores, deseos y esperanzas de tus usuarios.
Recuerda que las cosas pueden ir cambiando conforme avances, pero es propio del proceso.
Amplía la información y no te quedes con las entrevistas, busca noticias, innovaciones recientes y localiza otras soluciones similares a lo que quieres resolver.
Hasta aquí, ¿tienes claro a quién está dirigida la solución.
Con toda la información que tienes, clarifícalo.
Segunda fase: Inmersión
No hay mejor manera de entender a las personas para las que estás diseñando que estando inmerso en sus vidas y comunidades, sostiene la guía de IDEO.
Habla con ellos en persona, entérate de dónde viven y cuál es su trabajo.
Pasa un día con tus posibles clientes de ser posible y observa qué es lo que hace.
Registra tus observaciones.
Un ejercicio propuesto por esta guía es la de armar una baraja propia con información que necesites jerarquizar.
Muéstrale las cartas –es recomendable que tengan fotografías ya que a través de las imágenes es más fácil conectar con las personas– a tus posibles clientes y pregúntales qué es lo más importante para ellos.
En esta fase puedes ayudarte de collages, dibujos, mapas.
Acércate a herramientas que puedan facilitar la documentación de la inmersión que realizas con tu cliente.
Tercera fase: Ideación
En esta parte, con base en toda la información recabada, tendrás que identificar las oportunidades de diseño que existen.
El objetivo es hacer tangible todo esto que aprendiste al hacer prototipos con base en tus ideas, el cual le enseñarás a las personas que entrevistaste y de las cuales recibirás retroalimentación, explica la guía.
Por supuesto, no es un proceso sencillo.
Necesitarás ordenar toda la información y transformarla en algo tangible.
Recuerda que esto es prueba y error y entre más veces lo hagas, mejores resultados obtendrás.
Si quieres unirte a nuestra comunidad de emprendedores y recibir información relevante sobre este y otros temas, solo tienes que registrarte.