En física, energía se define como la capacidad para realizar un trabajo.
En la naturaleza, la encontramos presente en diversas formas:
Elementos combustibles: petróleo, uranio, leña, etc.
Recursos naturales: agua, viento, sol, etc.
Dependiendo de su fuente, podemos separarlas en energías renovables y no renovables.
Las energías no renovables son aquellas que se encuentran en la naturaleza en una cantidad limitada agotándose en el tiempo, una de ellas son los combustibles fósiles, los cuales son el resultado de millones de años de la transformación de la biomasa, como el petróleo, el carbón o el gas.
Los principales recursos energéticos corresponden a combustibles fósiles.
Las energías renovables son aquellas que se obtienen de fuentes inagotables, ya sea por la enorme cantidad de energía que poseen, como el sol, el viento, el agua o el calor de la tierra; o porque son capaces de regenerarse a una mayor velocidad de la que se extraen, como la leña.
ENERGÍA PRIMARIA: Son aquellas usadas directamente tal como existe en la naturaleza, ejemplo: Carbón.
ENERGÍA SECUNDARIA: Son las que han sufrido alguna transformación por el hombre, provienen de una fuente primaria, ejemplo: Electricidad.