Un aula multisensorial o Snoezelen se ha convertido en una herramienta que permite trabajar el despertar sensorial a través de la acción y la experimentación.
La principal finalidad de la creación de un aula sensorial es que los más pequeños adquieran una serie de aprendizajes por medio del descubrimiento y desarrollen al máximo sus habilidades.
Entre los beneficios que las aulas multisensoriales aportan a los niños destaca: Recreación de historias sensoriales en etapas primarias aumenta la creatividad.
Los niños comprenden y recuerdan mejor ya que ven, tocan, huelen y oyen en cada rincón.
Desarrollan su pensamiento abstracto, amplia su mundo y sus límites internos.
Favorece la experimentación y la exploración.
Aumenta la seguridad en sí mismos.
Les enseña a relajarse y a tener autocontrol.
La exposición a este tipo de materiales está recomendada desde los cuatro meses hasta los cinco años.
Normalmente, siempre hay dos profesores/educadores por aula y los grupos son muy reducidos.
En este tipo de aulas se trabajan cuatro de los cinco sentidos: vista, oído, tacto y olfato.
Vista: La estimulación visual se consigue a través de elementos como la fibra óptica, la mesa de leds, luces y diferentes proyecciones en las paredes, techos o suelos.
Tacto: Con diversos materiales de mil y una texturas, cada día pueden tocar elementos diferentes, también pisan losetas con diferentes texturas y cuentan con mesas de arena, arcillas para que experimenten distintas sensaciones en sus manos y pies.
Olfato: La estimulación del olfato se realiza identificando olores, forma en que los niños se protegen y reconocen su entorno.
Oído La música siempre está presente en esta aula, los sonidos previamente elegidos hacen que los niños se transporten a diferentes lugares, les ayuda a relajarse, a concentrarse o a imaginar.
El aula multisensorial recrea una atmósfera interactiva de calma, seguridad y protección que invita a la exploración y al juego.
Trabajar los sentidos de forma unificada ayuda a una mayor capacidad de aprendizaje, estimula el pensamiento lógico y los niños consiguen importantes avances en la coordinación y la concentración.