Un espacio de trabajo saludable es una de las prioridades de este tipo de espacios laborales en los que la salud física está por encima de otras cuestiones. Se busca crear un entorno armónico para fomentar la productividad y participación entre los distintos compañeros, ese componente health friendly es uno de los rasgos identitarios de estas oficinas.
Iluminación bien estudiada, no basta con cualquier flexo, bombilla LED o lámpara de pie secundario, se opta por la luz natural, mejora el estado de ánimo y aumenta la productividad.
Buen mobiliario de oficina, cuanto más ergonómico, mejor, los muebles y equipos de oficina deben estar diseñados lo más ergonómicamente posible para promover una postura adecuada y reducir el riesgo de lesiones musculares como de los huesos.
Espacios para el descanso, un área designada en exclusiva para el descanso y la desconexión es clave en un espacio de trabajo saludable, esto permite a los empleados tomar pausas adecuadas, recargar energías y reducir el estrés.
Programas de bienestar, una vida más allá de las horas de trabajo como parte de una filosofía y estilo de vida saludable.
Entorno natural y zonas verdes, la presencia de ciertos elementos naturales, ya sean jardines interiores, plantas o áreas verdes que nos ayudan a conectar con la naturaleza con claves para respirar y sentirse más en armonía.
Contra la contaminación acústica, contar con espacios libres de ruidos es cada vez más valorado como un factor que genera bienestar.
Un espacio de trabajo saludable no se distingue mucho de los demás por su aspecto físico, pero en su interior, en su estructura, en su concepción, sí que es diferente, están pensados y construidos para crear jornadas de trabajo más amables, por lo que integran elementos que a simple vista quizá no llamen la atención, pero que son claves para ese bienestar.
Un edificio saludable cuenta con espacios accesibles para personas con discapacidad, algo también exigible a las oficinas, y parecidas soluciones a dichas oficinas.
Pero, además, mantiene un compromiso con las políticas de bienestar, con actividades que promuevan la salud de los empleados, la buena alimentación y el cultivo de la forma física.